La Guía de Gante. 04. ACTO II. El orgullo en los triunfos... y en las derrotas
LA GUÍA DE GANTE. 4
Acto II.
El orgullo en los triunfos...
y en las derrotas
0. La Guía de Gante 1. ACTO I Se levanta el telón y aparece una ciudad medieval en todo su esplendor 2. Graslei y Korenlei. Historias de un mundo que nace 3. El mercado del grano... y el propio San Nicolás 4. ACTO II El orgullo en los triunfos... y en las derrotas 5. El Belfort. Libertades, campanas y dragones de fuego 6. Orgullo y pasión. La Lonja de los Paños, el Ayuntamiento... y Carlos V 7. ACTO III Paz interior... y una misteriosa atracción 8. La Catedral que nunca pensó en serlo 9. Atracción fatal: La Adoración del Cordero Místico 10. ACTO IV Las pequeñas (y grandes) cosas de la vida 11. La carne, los Viernes y Margarita la Rabiosa 12. Los obreros, el pescado y el poste de las ejecuciones 13. ACTO V Un final que bien puede ser un principio 14. Un castillo que vino de las Cruzadas 15. Felipe de Alsacia, el rey Arturo y la búsqueda del Santo Grial 16. EPÍLOGO El espectáculo ha finalizado... ¿...o no? 17. EXTRA. Gante de noche 18. EXTRA. OJO a los 10 días de Gante
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En la siguiente plaza hay un edificio que ya desde lejos te atrapa y te lleva en volandas hacia ella. Es el Belfort, la espectacular torre símbolo de las libertades de la ciudad.
Desde lo más alto un dragón dorado vigila noche y día.
La libertad era el mayor tesoro para los burgueses. Sabían perfectamente que el mundo que habían creado sólo podía sobrevivir si eran capaces de mantener esas libertadas. La libertad había generado la riqueza, y la riqueza necesitaba libertades para seguir creciendo.
Estás en el verdadero corazón político de Gante. Y, como ya has adivinado, aquí vamos a hablar de libertades... y de su pérdida.
Si las plazas anteriores eran el símbolo del trabajo y el dinamismo de estos burgueses mercaderes y artesanos, esta plaza es el símbolo de las libertades... Pero al mismo tiempo -y justo por eso- fue también el lugar donde de llevó a cabo el mayor acto de humillación que haya sufrido nunca la ciudad.
Hoy los ganteses están fuertemente orgullosos de esas victorias... y de esas derrotas. Son de esos pueblos que han hecho de la derrota un motivo de orgullo. Porque dicen que la derrota no es el fin de una lucha, sino el comienzo de la siguiente.
¡Arriba el telón!
Mapa del recorrido